Respiración en los animales
En
el interior de las células de los animales, los nutrientes son oxidados en las
mitocondrias mediante la respiración celular. Para llevar a cabo este proceso,
se requiere oxígeno, se obtiene energía y se producen sustancias de desecho,
como el dióxido de carbono, que debe ser eliminado. El oxígeno proviene del
medio externo, al que también se expulsa el dióxido de carbono, mediante el
sistema respiratorio.
La respiración en el aire y en el agua
El aire atmosférico contiene mucho más oxígeno que el agua, siendo la proporción de este gas en el aire casi constante, pues el oxígeno consumido en la respiración iguala al liberado en la fotosíntesis.
En
el medio acuático, la proporción del oxígeno varía, siendo menos su
disponibilidad en el agua marina (salada) que en el agua dulce. Los animales
acuáticos tienen que hacer pasar grandes cantidades de agua por sus superficies
respiratorias, lo que implica un gran desarrollo de las branquias.
Tipos de respiración
Los animales relativamente más sencillos, como esponjas de mar, pólipos y medusas, no tienen sistemas respiratorios y el intercambio de gases se realiza a través de la superficie de su cuerpo a través del proceso de difusión, realizando así la respiración directa, ya que toman directamente el oxígeno disuelto en el agua.